StoColor Climasan, pintura para interior que elimina sustancias nocivas del aire gracias a la luz artificial

Disponer de productos o elementos constructivos que ayuden a contar con espacios higiénicos, libres de bacterias y contaminantes, está ahora más de moda que nunca. Teniendo en cuenta que nos adentramos en los meses más fríos del año y que, a raíz de las medidas de restricción, este otoño e invierno pasaremos muchísimo más tiempo en casa, son muchos los que están apostando por soluciones que ayuden a mejorar la calidad del aire de su vivienda, oficina o establecimiento. Entre estos productos, las pinturas para interior que limpian el ambiente de contaminantes son uno de los productos estrella por los que más se está apostando.

Y no es para menos. Gracias al efecto de la luz, son capaces de purificar el aire continuamente, descomponiendo eficazmente los olores y neutralizando las sustancias nocivas que tanto ponen en riesgo nuestra salud. Sin embargo, y aunque enormemente útiles, este tipo de revestimientos suelen actuar única y exclusivamente a partir de la incidencia del sol, lo que supone una limitación.

Conscientes de este hándicap, desde Sto decidimos, una vez más, revolucionar el mercado y crear una pintura de interior que consiguiese el mismo propósito de limpieza también con iluminación artificial. Y así es como surgió StoColor Climasan.

Pintura para interior StoColor Climasan: aire fresco alrededor del mundo

StoColor Climasan es la primera pintura de interiores que inicia el proceso de limpieza sin la necesidad de la luz solar, ya que la iluminación interior estándar es suficiente. Este proceso se produce gracias a un catalizador comprendido dentro del producto que se activa con cualquier influencia lumínica, natural o artificial. Naturalmente, cuanto mayor sea la intensidad de la luz y mayor sea el área de la superficie, mejor será el efecto.

El resultado es una mejora notable en la calidad del ambiente, incluso en áreas muy frecuentadas como cocinas, hoteles o áreas para fumadores.

StoColor Climasan en seis preguntas

Este producto surgió gracias al duro trabajo del departamento de I+D de Sto. Estos expertos trabajan a diario en labores de mejora, con equipos de medición y ensayo avanzados, para fabricar soluciones innovadoras, seguras y resistentes. A continuación, os detallamos los principios y características concretas en las que se basaron estos profesionales a la hora de crear esta revolucionaria puntura para interior. ¡Atentos!

¿Cómo funciona? StoColor Climasan es altamente absorbente. Las sustancias nocivas y las moléculas de gas suspendidas en el aire ambiente se adhieren a las superficies revestidas de paredes y techos. El catalizador en la pintura se activa con la luz y descompone los contaminantes y los olores en sus compuestos constituyentes más pequeños, que luego se evaporan.
¿En qué consiste su catalizador? Es una variante del dióxido de titanio, pigmento blanco más extendido que se encuentra en casi todas las pinturas interiores para paredes, pero también en la pasta de dientes, cosméticos y numerosos alimentos. El dióxido de titanio clásico solo se activa bajo luz ultravioleta. Nuestra versión mejorada es más activa. Esto acelera significativamente la degradación de sustancias nocivas.
¿Qué olores y contaminantes descompone? Los llamados compuestos orgánicos, como los humos de cocina o del tabaco, así como ciertos contaminantes, tales como solventes y plastificantes, que a menudo surgen de adhesivos o revestimientos.
¿Cuánto tiempo dura su efecto? Tiene la misma vida útil que otros colores de interior de alta calidad. El catalizador en sí no consume. Cada vez que la luz visible llegue a la superficie, los olores y los contaminantes se descomponen.
¿Cómo se procesa y aplica StoColor Climasan? Igual que una pintura de emulsión interior convencional. Se puede aplicar en la pared y el techo con un rodillo o cepillo. Además, debido a su alto contenido de pigmento, el color tiene una alta opacidad, por lo que una sola capa es suficiente.
¿Dónde tiene sentido el uso de StoColor Climasan? Su uso puede aplicarse en cualquier superficie que tenga luz (natural o artificial). No obstante, cuanto mayor sea el área recubierta y mejores sean las condiciones de luz, mayor será el efecto. Así, las superficies del techo son particularmente adecuadas porque no están cubiertas por muebles.