La rehabilitación como estrategia clave en la construcción sostenible: el caso del Ayuntamiento de Trofa
En un mundo cada vez más afectado por el cambio climático y el agotamiento de recursos, la construcción sostenible y el desarrollo urbano se enfrentan a desafíos urgentes en términos de sostenibilidad. En este contexto, surge la rehabilitación de viviendas y otros edificios como una estrategia clave para reducir el impacto ambiental. Esta práctica no solo contribuye a preservar el patrimonio arquitectónico y cultural, sino que, al evitar el proceso de demolición y nueva construcción, minimiza considerablemente el uso de materiales nuevos, ahorra energía y reduce el desperdicio.
En este sentido, nuestro proyecto situado al sur del casco urbano de Trofa, Portugal, destaca como un ejemplo de cómo la rehabilitación puede servir tanto a la sostenibilidad como al desarrollo urbano. Al transformar la antigua planta procesadora de cereales “Indústria Alimentar Trofense” en el nuevo Ayuntamiento de Trofa, el despacho de arquitectura Noarq logró rescatar un edificio prácticamente en ruinas, convirtiéndolo en un espacio funcional, moderno y respetuoso con el entorno. Este proyecto, más allá de una simple remodelación, es una apuesta consciente por una arquitectura que minimiza la huella ambiental, aumenta la eficiencia energética, revitaliza el espacio urbano y aporta un valor duradero al municipio y sus habitantes.
El Ayuntamiento de Trofa: fusión de diseño contemporáneo y arquitectura histórica
Situado al sur del casco urbano de Trofa, el nuevo Ayuntamiento ocupa una posición estratégica cerca de las antiguas vías de tren, hoy en desuso. Y es que, esta área, marcada por la discontinuidad y baja densidad del tejido urbano, necesitaba un impulso para su revitalización. Con una superficie de 6.200 metros cuadrados, la antigua planta procesadora de cereales fue el espacio ideal para albergar las dependencias administrativas del municipio, proyectándose, además, como un pilar de desarrollo urbano para el futuro de esta zona.
La rehabilitación fue ambiciosa: los arquitectos de Noarq decidieron conservar únicamente el antiguo almacén del complejo, mientras que el resto de las edificaciones fueron derribadas. Este almacén, símbolo del pasado industrial de Trofa, fue integrado en un conjunto de cinco edificios nuevos, revestidos en ladrillos negros elegantes que, además de otorgarles un carácter moderno y sólido, rinden homenaje a la historia ferroviaria de la ciudad. Este particular diseño hace referencia al hollín que ennegrecía los edificios cercanos a las vías, creando así una conexión visual entre la nueva sede administrativa y el pasado de Trofa.
En el interior, el diseño es igualmente cuidadoso y acogedor. La madera clara, el hormigón visto y la luz natural predominan en los espacios, generando un ambiente luminoso y cálido que contrasta armoniosamente con la fachada negra exterior. En la gran sala del antiguo almacén, se han resaltado las vigas de madera originales, que vuelve a aportar un toque distintivo que conecta el pasado y el presente de Trofa en un solo espacio.
La participación de Sto: innovación en sistemas de revestimiento y sostenibilidad
En la rehabilitación del Ayuntamiento de Trofa, nuestra participación fue fundamental para dotar al edificio de una estética duradera y una resistencia óptima. Uno de los principales desafíos era crear un revestimiento que respetara la estructura original y, además, evitara el uso de cemento para preservar la compatibilidad estructural. De ahí que se eligieran soluciones que no solo fueran funcionales, sino también respetuosas con el entorno y diseñadas para mantener la autenticidad del acabado.
Nuestro sistema StoArmat Classic fue clave en este proyecto. Este es un mortero de armadura orgánico, completamente libre de cemento, que destaca por su resistencia al impacto y su capacidad para expandirse sin formar grietas. Además, al ser altamente resistente, disminuye la necesidad de mantenimiento a lo largo de los años, un aspecto fundamental en construcciones sostenibles.
Para el acabado de la fachada, nuestro equipo eligió Stolit Milano, un revoco de grano muy fino que, en combinación con la técnica de veladura y StoSil Lasura, consiguió el efecto estético que el arquitecto deseaba. Este acabado permite que se aprecien las capas sucesivas de mortero, dotando a la fachada de una apariencia que parece haber sido formada a lo largo del tiempo, integrándose de manera orgánica en el entorno y dando una sensación de autenticidad y tradición.
Finalmente, se aplicó StoColor Sil, una pintura para fachadas a base de silicato que, además de ser hidrófuga y permeable al vapor, posee una alta resistencia a las inclemencias del tiempo. Su alta permeabilidad permite que la fachada respire, ayudando a conservar el material base de la construcción y mejorando la durabilidad sin necesidad de protección biocida, lo cual contribuye a la sostenibilidad del edificio. Este enfoque hacia la eficiencia energética y la rehabilitación de viviendas demuestra nuestro compromiso con la construcción sostenible y un futuro más verde.
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